La salud sexual y reproductiva es un estado general de bienestar físico, mental y social, y no de mera ausencia de enfermedades o dolencias, en todos los aspectos relacionados con el sistema reproductivo y sus funciones y procesos. Es la capacidad de disfrutar de una vida sexual satisfactoria y sin riesgos la libertad para decidir procrear o no hacerlo, cuando y con qué frecuencia. La salud sexual y reproductiva es fundamental para las personas a lo largo de su ciclo vital, se inicia en la niñez, se refuerza en la adolescencia, se ejerce en la vida adulta y sus consecuencias persisten en el período post-reproductivo.

Las acciones de salud son fundamentales para la decisión de tener un hijo(a) en el momento en que se desea (regulación de la fertilidad), la gestación, preparación para el nacimiento y la crianza, atención personalizada durante el preparto-parto, atención integral de la mujer y el niño(a), apoyo a la crianza compartida y no sólo de responsabilidad de la madre, promoción del desarrollo biopsicosocial del niño(a) y atención preventiva de salud de la familia.

Grupo focalizado

La salud sexual y reproductiva está centrada en las personas y en sus derechos y reconocer a las personas como sujetos activos que participan junto a las y los profesionales de salud en la búsqueda de una mejor calidad de vida para sí mismas, sus parejas y sus familias.

Prestaciones que contempla a nivel primario, secundario y terciario

• A nivel primario, la Estrategia de Intervención Nutricional a través del Ciclo Vital (EINCV) se enmarca en los Objetivos Sanitarios del país. El Programa de Salud Sexual y Reproductiva  se encuentra en funcionamiento en la red asistencial de nivel primario de salud del país. Por ejemplo, existe una “Guía para promover la paternidad activa y la corresponsabilidad en el cuidado y crianza de niños y niñas”. Esta guía está orientada a profesionales del Sistema de Protección Integral a la Infancia de Chile Crece Contigo; entregando información para que los profesionales eduquen a la población.

También existe el Programa Nacional de Salud Integral de Adolescentes y Jóvenes, impulsado por el MINSAL, que incluye en su análisis de los problemas de salud de adolescentes y jóvenes chilenos la salud sexual y reproductiva; donde se refiere al inicio de la actividad sexual, los aspectos reproductivos y las infecciones de transmisión sexual.

• A nivel secundario, en base al Programa Chile –Crece Contigo o Sistema de Protección de la Primera Infancia se fortalece el control prenatal para todas las usuarias del sistema público de salud que incluye entre otras actividades:

• La entrega de una guía anticipatoria denominada “Empezando a Crecer”,

• La inclusión de una evaluación psicosocial abreviada como sistema de vigilancia epidemiológica.

• Screening universal para la activación de prestaciones diferenciadas (visita domiciliaria integral por ejemplo),

• Oferta universal de educación prenatal y la garantía de acompañamiento de una figura significativa en todo el proceso.

¿Qué metas tiene contempladas?

1. Promover la salud reproductiva fomentando la salud y el desarrollo de los individuos a lo largo de su vida (aspectos nutricionales en ambos sexos, promover estilos de vida sanos y relaciones respetuosas y equitativas entre los sexos).

Es necesario incorporar a los hombres en los programas de salud reproductiva y apoyarlos para que puedan asumir la responsabilidad de su comportamiento sexual y reproductivo así como sus funciones sociales y familiares.

• Favorecer el ingreso precoz al control de embarazo y diada (púerpera y recién nacido).

• Incorporación del progenitor a todas las acciones de salud durante la gestación y post –parto.

• Detección del riesgo psicosocial (Aplicación de Pauta Simore) al 100% de las gestantes.

• Fomentar la lactancia materna desde la gestación como el mejor alimento para el niño- niña y así mismo inmuno-protector del recién nacido y lactante.

• Evaluar las condiciones del entorno personal y la factibilidad de modificar factores de riesgo bio-psico-sociales detectados coordinando con la red comunal.

• Evaluar la evolución de patologías y comprobar el cumplimiento de indicaciones a tratamiento.

• Fomentar la adhesividad al control en el Centro de Salud, tanto de la embarazada puérpera y el recién nacido así como también a los talleres de embarazo, parto y recién nacido.

• Coordinar con redes de apoyo existentes

2. Prevenir problemas específicos de salud reproductiva con servicios accesibles de información, educación, orientación, asesoramiento y salud que ayuden a las personas a tomar decisiones orientadas a:

• Conocer sobre riesgos de una salud sexual desprotegida.

• Prevenir los embarazos no deseados.

• Entablar relaciones mutuamente responsables y satisfactorias.

• Elegir los anticonceptivos adecuados.

• Reducir el número de abortos.

• Reducir el riesgo durante el embarazo y parto.

• Prevenir, tratar y controlar las Enfermedades de Trasmisión Sexual (ETS).

3. Brindar atención, tratamiento y rehabilitación:

• Evaluar los aspectos psicológicos y sociales durante el embarazo y el parto que pudieran influir en la salud de la mujer y el niño niña.

• Enseñar la correcta utilización de técnicas anticonceptivas.

• Tratar enfermedades y trastornos propios de la mujer durante el proceso reproductivo y climaterio.

• Brindar rehabilitación a personas cuya salud reproductiva ha sufrido menoscabo a raíz de enfermedades y/o traumatismos.

• Evaluar otros aspectos de la salud reproductiva que puedan necesitar atención y que no estén estrictamente relacionados con el motivo de consulta.

¿De qué forma se vigila su cumplimento?

Aunque en Chile los indicadores de las áreas clásicas que comprende la Salud Sexual y Reproductiva son relativamente favorables, (por ejemplo, mortalidad infantil y materna muy bajas; fecundidad en descenso, entre otros), esto no significa que el concepto haya permeado las esferas donde se esperaría lo hiciera.

• Media anual de nacimientos: 292,000;
• Crecimiento demográfico anual: 1,36%
• Tasa global de fecundidad: 2,4 hijos por mujer
• Esperanza de vida al nacer: 75,3 años
• Tasa cruda de mortalidad: 5,6 por 1000
• Tasa de mortalidad materna: 25 por cien mil nacidos vivos
• Tasa de mortalidad infantil: 11,1 por mil nacidos vivos
• Tasa de mortalidad de menores de 5 años: 17,0 por 1000
• Media anual de defunciones: 82,000.